La entorsis de tobillo o esguince grado I ocurre cuando el tobillo gira, se dobla o tuerce de una forma anormal.
Ese giro o movimiento imprevisto, puede provocar una distensión o alargamiento de los ligamentos pero, esto no impide realizar movimientos completos. El proceso de inflamación y dolor es ligero. Cualquier persona puede sufrir una entorsis pero, es más común en personas mayores o deportistas, también personas con sobrepeso, cuando se realizan deportes en superficies irregulares, el tipo de calzado.
Recuperación
La recuperación varía entre 2 y 5 días, dependiendo de cada persona, estado físico y recuperación.
En las primeras 48 horas se recomienda poner hielo durante 10 minutos aproximadamente.
El reposo y mantener elevada la extremidad es fundamental. También evitar apoyar el pie para no forzarlo.
Entorsis de tobillo con edema
Cuando se produce un esguince o entorsis de tobillo, los ligamentos se distienden y, en algunos casos, se rompen y sangran. Esto conlleva a un edema o hinchazón que, según el tipo de esguince, el dolor es leve o agudo.
¿Qué es el edema óseo?
El edema óseo es una inflamación en la médula del hueso producto de una lesión. Esta zona contiene vasos sanguíneos que, al dañarse, provocan un sangrado dentro del hueso.
Las causas casi siempre son por traumatismos o por sobrecargas óseas.
El tratamiento puede incluir medicamentos para el dolor, fisioterapia y, en casos graves, cirugía. La recuperación puede ser lenta y llevar varios meses o incluso años.
¿Qué pasa si no se cura el edema óseo?
Es fundamental lograr un tratamiento y recuperación adecuada del edema óseo ya que sino puede llevarnos mucho tiempo y puede repercutir en las siguientes complicaciones:
- Daño en el hueso, porque lo debilita y lo hace más propenso a fracturas o lesiones.
- Artrosis en la articulación afectada, causando dolor y rigidez
- Necrosis ósea: Es cuando el tejido óseo muere debido a la falta de suministro de sangre. Esta complicación puede ser muy grave y requerir cirugía para tratarla.
¿Cuánto dura una entorsis?
Una entorsis es un esguince grado I. En estos casos, no se necesita inmovilizar la zona pero, sí, llevar adelante un tratamiento de entre 2 a 4 semanas con un fisioterapeuta, reposo, hielo, compresión y elevación de la zona afectada.Para este tipo de lesión, existen las tobilleras, que son las aliadas fundamentales para prevenir, recuperar o rehabilitar la zona afectada. Te detallamos una guía de cuál usar.
¿Qué es una tobillera estabilizadora?
La tobillera estabilizadora es un dispositivo que se utiliza para ayudar a proteger y estabilizar la articulación, cuando hay un esguince.
Está diseñada para envolver firmemente el pie y el tobillo, proporcionando soporte si es que los esguinces son repetitivos.
Están hechas de diferentes materiales, tamaños y estilos. Las usan los que hacen deportes de alto impacto como en el fútbol, vóley, básquet, donde el riesgo de lesiones en el tobillo es mayor debido a los movimientos bruscos.
¿Qué tipo de tobillera es mejor?
El tipo de tobillera dependerá de la lesión específica, la actividad deportiva o actividad diaria y las necesidades de cada persona. Algunos tipos comunes de tobilleras y sus características:
- Tobilleras de compresión: diseñadas para proporcionar una compresión suave alrededor del pie y el tobillo para ayudar a reducir la hinchazón y la inflamación. Son una buena opción para lesiones menores o para personas que desean una mayor estabilidad y soporte durante actividades de bajo impacto.
Estos nuevos soportes están diseñados de materiales transpirables y resistentes al agua, anatómicos, adecuados para una variedad de deportes y condiciones climáticas. Además, su diseño acompaña los movimientos ofreciendo mayor dinamismo, eso beneficia cuando se practica algún deporte de alto rango de movimiento del tobillo. Se adapta mejor y proporciona un ajuste más cómodo y efectivo.
- Tobilleras con tiras: Estas tobilleras tienen correas ajustables que se envuelven alrededor del pie y el tobillo para proporcionar un soporte adicional y un ajuste personalizado. Buena opción para personas que necesitan más soporte que una tobillera de compresión, pero que aún requieren un rango de movimiento completo.
Un inmovilizador acordonado con movimientos limitados, como la palabra lo dice, limita los movimientos en la articulación afectada, en este caso del tobillo, porque permite que una lesión se cure adecuadamente. Es una tobillera rígida que tiene un soporte que rodea la articulación y se sujeta con cordones o correas.
Debe ser supervisado por un médico o fisioterapeuta y retirarse regularmente para permitir que la articulación afectada se mueva y se fortalezca de forma adecuada.
- Tobilleras rígidas: Estas tobilleras están hechas de plástico o metal y brindan un soporte máximo y una limitación del movimiento. Son una buena opción para lesiones graves o deportes de alto impacto donde el riesgo de lesiones es mayor.
Utilizadas para inmovilizar y estabilizar la articulación del tobillo, previniendo lesiones adicionales
Estas tobilleras están hechas de neoprene y se extienden desde el talón hasta la parte superior del tobillo. Incluyen 4 varillas que se ajustan a ambos lados de la pierna. Algunas tienen almohadillas acolchadas para mejorar la comodidad y reducir la irritación en la piel.
- Tobilleras con varillas flexibles deportivas: Te ayudarán a mantener el movimiento de una forma más cómoda sin lastimar la lesión. Cuenta con material de neoprene de 4 milímetros de espesor, que brinda el efecto térmico que se necesita para una correcta entrada en calor y una recuperación efectiva.
- Tobilleras de frío y calor: Este tipo de tobillera es ideal para combinar en un solo lugar la terapia que da el frío y el calor en una lesión. Brinda una solución desinflamatoria y es adaptable a ambos pies.